PCV PROPONE INCREMENTO DE TODAS LAS ESCALAS SALARIALES DE TRABAJADORES PÚBLICOS Y PRIVADOS

Salario mínimo no cubre presupuesto familiar

Tribuna Popular.- Ante el anuncio del presidente Nicolás Maduro, el pasado 3 de noviembre, de incrementar un 15% el salario mínimo nacional, el Partido Comunista de Venezuela (PCV) insistió en su propuesta de aumento general de sueldos y salarios de forma escalonada, para que lo reciban todas y todos los trabajadores, públicos y privados, de todas las escalas salariales, garantizando que quienes menos ganan reciban un porcentaje mayor.

Pedro Eusse, Miembro del Buró Político del PCV, expresó que es necesaria una política de recuperación, fortalecimiento y protección del poder adquisitivo del pueblo trabajador, y que “frente a las alzas incesantes de los precios de bienes y servicios, el aumento decretado, en esa proporción y de esa forma, lo consideramos muy insuficiente”.

Además, “el sólo incremento del salario mínimo nacional no produce un impacto positivo en el poder adquisitivo de la mayoría de los salarios, sino que produce muchas distorsiones, especialmente en el precio de los bienes y servicios”, resaltó el dirigente comunista.

Eusse aclaró, sin embargo, que la decisión gubernamental “evidencia una intención de enfrentar el alto costo de la vida, de proteger el poder adquisitivo de los salarios, pero ese incremento no responde a las necesidades que tienen los trabajadores, la necesidad de enfrentar la carestía de la vida y de fortalecer el salario real”.

El aumento decretado por el gobierno no es general, para todos los trabajadores, sino sólo del salario mínimo que a partir de diciembre alcanzará los 4.889 Bs. Si bien es cierto que con los dos anteriores habidos en 2014 se completaría, a finales de año, un 64,5% de incremento, será en ese momento cuando alcance a igualar la tasa anualizada de inflación, pero no indemniza a los asalariados por el hecho de que durante la mayor parte del año han vivido con niveles de inflación superiores a 60% y aumentos salariales muy por debajo de esa cota, por lo que el deterioro del nivel de vida acumulado durante los meses de salarios inferiores a la inflación queda sin ser compensado.

Los sectores de menores ingresos son los más vulnerables al deterioro del salario y merecen por lo tanto consideraciones especiales, pero no es menos cierto que también las y los trabajadores con remuneraciones superiores al salario mínimo han sufrido las consecuencias de la situación económica.

Por eso, puntualizó Eusse, el PCV reitera su planteamiento de que el Gobierno decrete un incremento de todas las escalas salariales, de trabajadores públicos y privados, que beneficie en mayor medida a los sectores de menores ingresos pero compense también a los demás estratos de la clase trabajadora.

La propuesta del Partido del Gallo Rojo es que las y los trabajadores que perciban hasta tres salarios mínimos reciban un aumento de 50%; de tres a cinco salarios mínimos, reciban 30% de aumento; y, a partir del quinto salario mínimo, se les aumente en 15%.

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Salario mínimo no cubre presupuesto familiar

El Gobierno trata de compensar con reiterados aumentos salariales el deterioro del ingreso real de las y los trabajadores, pero suelen resultar insuficientes ante la situación económica general y la inflación que experimenta Venezuela.

El reciente aumento decretado por el Presidente Maduro es claramente representativo de esa tendencia hacia el deterioro del poder adquisitivo de la remuneración salarial.

El Instituto Nacional de Estadísticas (INE), adscrito al Ministerio de Planificación, sólo calcula la que denomina «Canasta Alimentaria Normativa» (CAN), sobre la base de los menores precios nominalmente disponibles en el mercado (es decir en Mercal), siendo que tales precios no son los vigentes en la mayoría de los establecimientos del país (por ejemplo en Abastos Bicentenario o en Pdval, para no nombrar las cadenas de supermercados de capital no estatal).

Para septiembre, hace casi dos meses, el precio de la CAN era de 5.741 Bs, mientras que el salario mínimo nacional, a partir de diciembre, será de 4.889 Bs, evidenciándose que no alcanza a cubrirla.
Sumando al nuevo salario el incremento simultáneo del bono de alimentación (el cual, dicho sea de paso, no beneficia ni a pensionados y jubilados ni a quienes perciban más de tres salarios mínimos), el total de la remuneración mensual mínima llegará en unos días a 6.916 Bs, cantidad que efectivamente supera en 20% el costo de la CAN de hace dos meses. Es de recordar que en el año 2000 esa suma excedía en 71% el costo de la CAN, lo que indica la tendencia hacia el deterioro del salario real.

Ni el INE ni ningún otro organismo del Estado calculan el costo de la «Canasta Integral de Bienes y Servicios» que debe adquirir mensualmente una familia promedio; el único componente de esa canasta que tiene un precio oficialmente establecido es la CAN, que cubre sólo la parte alimentaria del presupuesto familiar.

Organismos privados de orientación oposicionista, como el Cendas-FVM, han estimado en 24.542 Bs el costo de la que denominan «Canasta Básica Familiar», sin utilizar datos y cifras oficiales del Banco Central de Venezuela (BCV) y el INE.
Una «Canasta Integral de Bienes y Servicios», para una familia promedio, debe considerar los demás componentes de ese presupuesto: vestido y calzado, transporte, vivienda, servicios, entre otros.

El INE y el BCV aplican ponderaciones porcentuales en la metodología para el cálculo del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), en la que asigna a «alimentos y bebidas no alcohólicas» un 32,2% del total del presupuesto familiar. Tomando el precio de la CAN para septiembre y aplicando a los otros componentes del presupuesto familiar las ponderaciones reconocidas por los entes estadísticos del Estado, una familia promedio necesitaba hace dos meses 17.839 Bs para cubrir de manera integral sus gastos.

Incluso construyendo una «Canasta Mínima de Bienes y Servicios», de cuyo cálculo se supriman las categorías de bienes y servicios que podrían ser obtenidos gratuitamente de entes oficiales, tales como servicios de salud y educación, y las categorías potencialmente prescindibles como alcohol y tabaco, esparcimiento y cultura, y hoteles y restaurantes, el precio de esa canasta reducida todavía alcanzaba 12.799 Bs en septiembre.

Por ende, el nuevo salario mínimo más nuevo bono de alimentación que entrarán en vigencia en unos días, apenas hubiera alcanzado hace dos meses para cubrir 39% de la «Canasta Integral de Bienes y Servicios» ó 54% de la «Canasta Mínima».

Fuente: Tribuna Popular Nº 246