Por: Francisco Guacarán. Especial para TP
Miembro del Comité Regional del PCV en Caracas
En los últimos meses se ha dado un intenso debate sobre las causas de la actual situación económica en nuestro país, ante el cual el PCV ha señalado que se trata de una crisis del modelo de acumulación rentista intrínseco del capitalismo venezolano, con una economía monoproductora y multiimportadora.
Desde la acera de la burguesía y sus lacayos han señalado como culpable a un supuesto modelo “socialista” que ha aplicado el gobierno nacional, demostrando un descaro intencional y premeditado en la manipulación sobre el tema, para ocultar así su responsabilidad y participación directa como promotores del actual panorama.
Por otro lado, algunos voceros del propio gobierno nacional y dirigentes políticos de izquierda han culpado casi exclusivamente a una página web de las distorsiones en la economía venezolana, especialmente en un fenómeno conocido para las y los venezolanos: la tasa de cambio Bs/US$, lo cual se evidencia en la publicación de una tasa paralela que difiere ampliamente de las definidas por el Estado venezolano.
Ciertamente, Dólar Today (DT) es una herramienta de la burguesía y sus acciones son cónsonas con los objetivos del imperialismo y sus lacayos nacionales y foráneos en sus agresiones contra nuestro país. Esto se demuestra al difundir una tasa de cambio que nada tiene que ver con operaciones financieras locales, ni se ajusta a alguna ecuación comúnmente utilizada por la teoría económica para obtener tasas de este estilo.
Por lo cual, hablamos de un acto arbitrario e intencionado que trata de ser impuesto como referencia al mercado venezolano y seguramente apoyado por sectores de la rancia oligarquía colombiana.
Evidentemente DT es una herramienta sediciosa y debe ser combatida por su clara conexión con las políticas imperialistas contra nuestro país. Pero, también deben ser señalados y corregidos –con más que un plan elaborado en 72 horas– aquellos errores y omisiones que promueven el fortalecimiento del rentismo y la improductividad, aspectos que generan las condiciones para que un puñado de mercenarios detrás de una computadora puedan causar tal impacto en el sistema cambiario y en la economía real venezolana.
Afirmar que la especulación y la alta inflación son por culpa de una página web sería, además de una irresponsabilidad, una falta de comprensión de la gravedad del asunto.
El movimiento revolucionario venezolano debe ser muy responsable al identificar las causas reales de las actuales condiciones económicas. Exigir un juicio a los operadores de DT, “eliminar” esta página o prohibir nombrarla, pudiendo ser justificadas, no son medidas que atacan el problema medular, sino que desvían la atención del problema a otros aspectos.
Es por ello que el PCV ha insistido tanto en la aplicación de una nueva política económica que profundice el proceso de cambios y garantice la participación del pueblo hacia una dirección revolucionaria: que no se le entregue ni un dólar más a la burguesía, cárcel a especuladores y corruptos, estatización del comercio exterior, desarrollo industrial con participación obrera y popular, nacionalización completa de la banca, control de precios y planificación centralizada-participativa de la economía.
Superar las actuales condiciones es posible sólo desde la vía revolucionaria y con el pueblo trabajador como principal protagonista, quien debe conocer con absoluta sinceridad y transparencia los retos de la situación actual para poder superarla. Esa es una tarea de las y los revolucionarios.
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